ONCE

NINGUN PADRE LA IGLESIA
HA SABIDO EXPLICAR
PORQUE NO EXISTE
UN MANDAMIENTO "ONCE"
QUE ORDENE A LA MUJER
NO CODICIAR AL HOMBRE
DE SU PROJIMA

Mario Benedetti: "Vientos del exilio"


El cruce era inevitable, venías a mi encuentro, hubiera querido desaparecer, las mariposas en mi estomago se despertaron de su letargo de años.
Hacía tanto tiempo que no las sentía.
Hablamos, comentamos, preguntamos, las palabras cubrían los verdaderos deseos, quizás abrazarnos, compartir la alegría del reeencuentro inesperado.
Tus ojos me parecieron más bellos de lo que los recordaba, incluso más dulces, en ese suave tono caramelo, tu piel más oscura, unas canas aquí o allí y todo igual.
Me hubiera gustado saber que pensabas de mi aspecto: estaba cambiada, peor? mejor? igual?.
"Hasta pronto" dijiste con un beso de despedida en la mejilla; uno y no dos.
"hasta pronto" respondí sin decirlo, y continué caminando sabiendo que "pronto" no forma ya parte de nuestra historia.-