martes, septiembre 19, 2006

Tiempo perdido

Suelo leer en posición de loto, es decir con las piernas cruzadas una debajo de la otra.
De hecho es una de mis posiciones preferidas, será porque tengo las piernas cortas.
Y no es la primera vez que se me duermen, hubo un tiempo en que también se me dormían las manos, luego desapareció desde hace años.
Quizás tenga que ver con un problema de salud incipiente, o crónico, no sé; mala circulación, muscular, neurológico, simplemente pasó una vez más.
Cuando me levánté sentí los pies dormidos, pero hice como siempre, los sacudí un poco y comencé a andar....dí varios pasos,me paré porque no despertaban, sobre todo el pie derecho, me apoyé quizás no lo sé, solo sé que la pierna ya no respondió y me caí, llevando conmigo varios objetos.
Una caída pesada, de costado, que me dejó dolorida por varios días.
En el suelo y por unos segundos el pánico me invadió. Y si ya no podía volver a mover la pierna? y si algo me estaba pasando?....fueron segundos con decenas de imágenes desfilando.
Quizás no ayude mi trabajo habitual en el que veo constantemente como la vida d ealguien cambia radicalmente en minutos; sin hablar de mi experiencia personal ene se sentido.
El caso es que me encontré temiendo tocar mis pies por miedo a darme cuenta que no los sentía.
Al final lo hice porque debía levantarme de una u otra forma.
Y poco a poco, volví a andar.
Ese episodio pequeño, sencillo casi cotidiano(no debo ser ni la primera ni la última a la que le pasa), pero novedoso para mí, que me precio de saludable, confrontó con miedos enquistados, oscuros augurios y luego con la obligación auto impuesta de estar atenta a las pequeñas cosas: caminar, comer, moverme libremente, acariciar,abrazar,reír, no sé que más verbos agrgar sin caer en la cursilería .
Sé que suena a manual de autoayuda pero estos temas siempre despiertan en mí esa urgencia del tempus fugit, no pasar un día sin exprimir lo bueno que hay a mi alrededor, porque siento o presiento o no sé, que todo puede volar por los aires.
Se me llenaron los ojos de lágrimas por todo lo perdido, lo irresoluto, lo no vivido.
....y le cambié el nombre al blog.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola Hera. Acababa de dejar un comentario en el anterior post cuando me he dado cuenta de la existencia de èste. Me sirve el mismo comentario: ¡A por ello/el, sin contemplación alguna!. Mientras el Algo/Alguien exista, se han perdido solo ocasiones de conseguirlo. Y como somos creadoras de ocasiones....... ;)